En el año 1982 Se constituye la empresa Cristalería Olca S.L., que en sus inicios estaba situada en un local de unos 200 m2 aproximadamente, en el municipio de Catarroja (Valencia). La infraestructura de la empresa era muy reducida, pero sin embargo permitió ir conociendo las características y vicisitudes del sector y adquirir clientes, que incluso en la actualidad siguen siéndolo, hecho que denota tanto la lealtad de sus clientes como el valor añadido que aportamos a dichos clientes.
Cuatro años más tarde, en 1986 la empresa realiza una inversión muy importante, adquiriendo una nave de 1.800 m2 en el municipio de Alcácer (Valencia), donde se trasladan, con la perspectiva de mantener el crecimiento tanto de la cartera de clientes como del volumen de pedidos.
Ese esperado crecimiento se produce y permite, que tan solo 7 años más tarde de esa primera gran inversión, la empresa pueda seguir mejorando sus infraestructuras y realiza una nueva inversión en activo fijo, adquiriendo la nave contigua a la adquirida en 1986, con lo que la empresa pasa a tener una capacidad de unos 5.000 m2.
Han pasado ya 7 años, desde que Cristaleria Olca empezó la andadura empresarial en el sector del vidrio, y tanto por las inquietudes que se perciben de los clientes y de los consumidores finales y por la observación y un estudio de las tendencias del mercado, se decide apostar por un producto en auge dentro del sector en ese momento: el vidrio curvado.
La empresa se embarca en un nuevo negocio, muy vinculado al de Cristalería Olca, pero con un producto claramente diferenciado, creando para ello la sociedad Emacris S.L., e invirtiendo en maquinaria de última tecnología: principalmente grandes hornos para curvado de vidrio.
Emacris S.L. necesita también infraestructura para poder funcionar y para ello, se adquiere otra nave colindante de 2.000 m2, consiguiendo con ello una capacidad total de 7.000 m2.
En 1995, Cristalería Olca se vincula contractualmente con Pilkington Automotive a través de una subcontratación de producción que supone para Cristalería Olca producir 10.000 m2 diarios de corte de lunas para vehículos.
Este hecho, implica una reestructuración total en la empresa para lograr el alcance productivo que el cliente Pilkington Automoitive espera de Cristalería Olca. Así pues, se instalan dos lineas de corte de hoja jumbo en tiempo record, se habilitan dos muelles de carga par carga y descarga simultanea, se reorganizan todos los tiempos de trabajo, añadiendo un nuevo turno de trabajo nocturno, con el cual, Cristalería Olca tiene una jornada productiva de 24 horas al día, consiguiendo con esto, además, una eficiencia energética total, ya que la maquinaria ahorra en el importante coste energético que supone el encendido y apagado de máquinas.
La relación entre ambas compañías dura varios años, con un compromiso y una sensación de satisfacción mutua, que hasta hoy en la actualidad perdura.
Durante todos estos años la empresa va evolucionando, invirtiendo en maquinaria, mejorando procesos de fabricación, aumentando su volumen de pedidos y cartilla de clientes y sobre todo manteniendo el posicionamiento líder indiscutible a nivel nacional dentro del sector del vidrio.
A principios del siglo 21 la empresa hace otro paso muy importante iniciando su internacionalización, captando clientes fuera de España sobre todo en Ucrania.
Justo cuando da comienzo la crisis en Españs, sobre el año 2008,después de haber sufrido unos importantísimos impagos por parte de clientes debido a la situación coyuntural española, y sobre todo en los sectores de la construcción y mueble, sectores que la empresa acapara un elevado porcentaje de su facturación. La empresa cambia drásticamente su política, y decide decrecer a velocidades tan grandes como la que creció durante tantos años.
Se analizan minuciosamente todos y cada uno de los clientes y se toman decisiones, se elimina el turno de noche, pasando a laborar el horario convencional, en poco tiempo se desprende de un gran parque de maquinaria de elite dentro del sector, se desprende de gran parte de su plantilla……
Todos estos cambios tan difíciles nunca supusieron un estado de depresión dentro de la dirección de la empresa, la empresa tenia unos objetivos marcados y unas metas, y estaba cumpliéndolas. Estamos orgullosos de esta restructuración a pesar de la opinión de la mayor parte del sector que veía peligrar la supervivencia nuestra empresa. Ahora pasado el tiempo podemos decir: que bien lo hicimos…
Ha partir del 2009, la empresa ha ido trabajando para poder llegar a cabo un relevo generacional eficaz. Puesto que es un momento critico en la vida de las empresas familiares.
Con la meta de asegurar la continuidad de la empresa a largo plazo, con independencia de quién la dirija, obligaba a establecer formas de trabajo replicables y no dependientes de personas ni personalismos.
continuara…….